Mal que pese, con este post empiezo de nuevo las actualizaciones del blog, estoy de vuelta. Las vacaciones han sido fantásticas, he leído mucho, he disfrutado mucho con mi peque, más activo que nunca y ahora toca hacer balance de lecturas. Aunque, por otra parte, eso prefiero dejarlo para más adelante donde realizaré un buen repaso.
En este artículo os ofrecía la posibilidad de votar los libros que queríais ver reseñados. Muchas gracias a los diez visitantes que votaron generosamente; intentaré que alguno de los libros que votaron aparezcan. No voy a reseñar todo por falta de tiempo, aunque habrá píldoras de todos ellos.
Curiosamente, la votación ha sido bastante unánime con el ganador, siete votos nada menos (un 70% de los votantes, ¡con ese número es muy fácil de calcular!) para “El Maestro y Margarita” de Bulgákov, la verdad es que estoy encantado con la elección; los siguientes, con cinco votos, empatados, para tres libros: “Una singularidad desnuda” de De la Pava, “La trama nupcial” de Eugenides y, sorprendentemente, “Historia mínima de la literatura española” de José-Carlos Mainer; el último, del que posiblemente también haga un comentario es Lemaitre con su “Nos vemos allá arriba”, recibió cuatro votos.
Ha sido curioso, aunque esperaba más votos para hacerme una opinión sobre intereses, pero los de novela negra-policíaca que había puesto no despertaron ningún interés, sin embargo los de contemporánea han recibido más votos; más lógico es que los que tengo en inglés despertaran pocas simpatías (ni votos!)
Para acabar, no quería dejar pasar la oportunidad; han pasado dos años desde que inicié está aventura. Este espacio ha crecido y, por ahora, consigo mantener imparcialidad y seleccionar mis lecturas a mi gusto. Es cierto que las visitas están estancadas pero no voy a cambiar los criterios de los que parto para conseguir más audiencia: la calidad estará por encima de la comercialidad; la crítica por encima del “reseñismo” y el “megustismo”.
Tengo que reconocer que todos los meses me cuesta seguir adelante, y me lo tengo que preguntar una y otra vez más: ¿sigo con el blog? Me requiere mucho tiempo, un tiempo cada vez más valioso.
Si todos los meses sigo es porque siempre veo alguna señal que me hace perseverar: la mayoría de las veces es por los lectores, las otras ocasiones es por mi editora personal!!! Que me sigue animando como el primer día. El caso es que por ahora seguiremos, los siguientes meses prometen ser fascinantes.
Un abrazo a todos!