Mayo está pasando como un tren

No debería pedir disculpas porque, al fin y al cabo, esto es una actividad opcional pero me siento extraño, me habría gustado escribir más cartas pero me ha resultado imposible: por tiempo y, sobre todo, por concentración. Mayo es un mes complejo por las “cosas de adultos” con el agravante de que, precisamente este año es aún más complejo y se ha multiplicado por eventos de principios de junio. Ser adulto es muchas veces agotador.

He buscado este pequeño hueco para contar algo y, de alguna manera, liberar un poco de esa tensión acumulada gracias a la escritura. En un par de días tendré nueva #carretilla de libros gracias a La casa tomada de Sevilla y a la ayuda de mi querido Jónatan; va a ser una remesa de libros especialmente enfocada al verano (aunque no sea la última, vendrá alguna más antes de las vacaciones), más concretamente a la lista de verano que quiero sacar en julio para que podáis encontrar alguna propuesta interesante.

El verano siempre es una época fantástica para buscar tiempo para leer, además, comparado con el invierno, tienes un montón de horas de luz natural al día y así da gusto leer. Sigo disfrutando un montón de mis lecturas actuales así que espero montar una lista chula con un montón de opciones disponibles.

Accesorios para juegos de mesa

Esta semana me llega por fin el tapete que había pedido específicamente para el juego de cartas de Arkham horror. Una vez termine la campaña de Motivos siniestros del Marvel champions iré directo a por la primera campaña larga con el AH: el legado de Dunwich.

Si he hablado anteriormente de lo importante que era clasificar las cartas y guardarlas en sus fundas, no menos importantes es tener los accesorios adecuados para hacer la campaña aún más inmersiva. Para ello he conseguido las flechas para indicar la dirección en la que se puede mover en el escenario, también he adquirido unas fichas del caos que no se borren (las que vienen con el juego son un poco frágiles) y, como decía anteriormente, un tapete que me sirva para jugar con dos investigadores contra el escenario en el que me encuentre.

Esta semana prepararé los mazos de cartas que voy a utilizar para intentar avanzar en la campaña, afortunadamente tengo varias opciones entre las que elegir y, aunque voy a partir de la típica configuración de Guardian-Buscador (ya habrá tiempo para hacer cosas más complejas), creo que las cartas que tengo me dan bastantes posibilidades, empieza la fiesta y estoy deseando ponerme con ello. Ya comentaré por aquí cómo va mi primera campaña.

Zelda: Tears of the Kingdom

Aunque no hablo tanto por aquí de mi Switch (entre otras cosas porque la considero ahora mismo en la cola de todo el ocio que consumo), de cara al verano, el lanzamiento tan esperado de Nintendo se convertirá en el juego que monopolizará mi experiencia en la consola. Disfruto muchísimo tanto de las historias relacionadas con Zelda (hasta del musou) y con la flexibilidad que ofrecen sus aventuras que se va a convertir en uno de mis divertimentos veraniegos.

Para ello tengo que hacerle hueco, estoy a medias en tres juegos que quiero terminar antes. Por un lado, el Pokemon Púrpura, solo me faltan unas veinte entradas de la pokedex y lo dejaré aparcado hasta que llegue el DLC a finales de año. Luego finalizaré el juego de rompecabezas de Toad que es muy divertido y adictivo y necesitaré algo más de tiempo para el musou de Fire Emblem.

Tengo muchísimas ganas de terminar todo el lío de mayo y junio. Este año voy a coger las vacaciones con más ganas que nunca después de tanta actividad. Qué locura el tren de la vida diaria.

Cuidaos mucho

Un abrazo

Relecturas, esas “raras avis”

Qué curiosa sensación se genera cada vez que termino una de mis listas de libros. Una extraña sensación de agotamiento y la consecuente necesidad de no escribir durante un tiempo, como si se me hubieran acabado las palabras y no tuviera más que compartir aunque sigo consumiendo cultura en proporciones masivas. Me cuesta entender que sea interesante para alguien. De ahí que deje pasar un tiempo para que desaparezca esta sensación. La realidad es que, si no pongo en copia a las editoriales, prácticamente casi nadie comparte mis listas. Agradezco eternamente a esas personas que las pasan y que no tienen nada que ver con el mundillo cultural. Cada vez me sorprendo más cuando las comparte gente metida en el negocio. Pero es cierto que por cada una de estas personas que lo hace vale la pena seguir escribiéndolas.

Ahora me he tomado un pequeño descanso de lecturas de novedades para coger algún libro pendiente de la (interminable) pila de lecturas. He aprovechado para ponerme al día con Perdición de Jack Ketchum y esta lectura me ha llevado a la relectura de La chica de al lado del mismo autor. Qué extraño es, en esta dictadura de la novedad, realizar una relectura de un libro más antiguo, más aún si se trata de una novela que me prometí no volver a leerla por el impacto que me produjo, agravado por mi condición de padre que da una nueva dimensión a las barbaridades que escribió Ketchum en esta novela tan terrorífica.

Releer elimina de un plumazo el “qué” para fijarse en el “cómo” (al menos en este caso, sé perfectamente cómo terminaba, es imposible olvidarlo) y añade nuevos matices que antes no te parecieron tan significativos porque estaba totalmente subyugado por la sucesión de acontecimientos.

Gracias a esta nueva relectura se producen nuevas sensaciones y reflexiones que puede ser interesante reproducir aquí. Aviso de antemano que comentaré hechos relevantes del libro y que pueden ser considerados spoilers, quien no quiera leerlos puede pasar al siguiente epígrafe.

Se considera que el autor está enmarcado dentro del movimiento splatterpunk, en otros libros este hecho es muy acusado pero en este, planteado en un continuo crescendo no eres tan consciente de lo que llega hasta los dos tercios del libro.

Además, cuando lo lees por primera vez tenías la sensación de que va haber escapatoria, esta idea desaparece en la relectura. Sabes que no hay redención, que no hay ninguna escapatoria, que todo va a ser un horror y no hay forma de evitarlo, esto conlleva que cada pasaje sea aún más triste, más desesperanzador, cada palabra supone una puñalada a tu corazón.

Sin duda es el libro más misógino del autor, todos los tormentos se aplican a chicas/mujeres y, aún peor, con el consentimiento de la matriarca Ruth que va generando ese clima, deshumanizando cada vez más a las víctimas, sembrando una serie de mensajes que los menores absorben sin sensación de culpabilidad: “si lo dice nuestro mayor tiene que estar bien y está justificado….”. Muchas veces a lo largo del libro se producen justificaciones de estas violencias y vienen casi siempre de hombres.

También es cierto que la actitud de Ruth se desencadena porque es una madre abandonada por su marido teniendo que cuidar a cinco niños y niñas, su desesperación ante sentirse maltratada en la sociedad es derivar sus problemas en las dos niñas que le han llegado de postizo. Ejemplifica a la perfección todas las conductas tóxicas de una sociedad patriarcal que ahora sí que somos capaces de identificar.

No fui tan consciente de esta situación en la primera lectura y es muy posible que, incluso inconscientemente, Ketchum lo retratara a pesar de su misoginia interiorizada. También creo que quiero buscar algo positivo que extraer pero no es descabellada esta interpretación.

Por lo que se sabe ahora, el autor se inspiró en un caso real (lo dice también el autor Brian Keene en el prólogo) y esto reafirma que, en mi caso particular, me da más miedo el horror puede ocurrir en mi día a día. El más real. Y en este caso con un punto de gravedad muy importante: buena parte de la violencia es ejecutada por menores de edad. Este punto, como padre, es primordial y supone otro punto de intensidad, entre otras cosas porque el bullying está muy presente hoy en día y, al fin y al cabo, en esta novela hay bullying llevado al extremo.

Lo más terrorífico es que según lo vas leyendo, el autor fue ciertamente muy inteligente planteando cada una de las situaciones que van generando la escalada de sucesos, cada pequeña cosa es un ladrillo que construye un muro de dolor. Es tristísimo cómo demoniza que una mujer haga arte (un cuadro) y a partir de ahí todo vaya cuesta abajo y sin frenos.

También vuelve a enfatizar que cualquier persona, según las circunstancias puede ser capaz de hacer cualquier cosa. Todos estos elementos, sin haber llegado al final de la historia otra vez, contribuyen a crear una de las historias más terroríficas que yo haya leído, miedo tengo de llevar de nuevo a ese final. Lo que está claro es que luego necesitaré algo más sosegado.

El proceso de clasificar en los juegos de cartas

He hablado antes en estas cartas de lo que estoy disfrutando de los juegos de mesa de Marvel Champions y Arkham Horror. De hecho ahora estoy desgranando la campaña Motivos siniestros y es la primera vez que disfruto de un personaje con el aspecto de protección (Ghost-spider) y me encanta lo bien que se sincroniza con Miles Morales. Hay que reconocer el mérito de los escritores del juego que son capaces de dar el Do de pecho en el desarrollo de las campañas.

Lo que no había comentado hasta ahora es lo que disfruto de ordenar el material según me llega. En juegos de esta índole es muy importante tener bien clasificadas las cartas para que sean fácilmente identificables según la partida que quieras desarrollar. De ahí que, una vez recibo cualquier expansión a continuación tenga que seguir los siguientes pasos:

-Buscar separadores verticales u horizontales en webs de referencia.

-Imprimir los separadores para luego plastificarlos en una tienda de reprografía.

-Una vez plastificados hay que cortar cada uno de ellos y adaptarlos al recipiente en que van a estar incluidos.

-Un vez tenga todos los separadores preparados, comprar las fundas que uso habitualmente para las cartas.

-Introducir cada una de las cartas en sus fundas (al mismo tiempo las voy leyendo), colocarlas en sus compartimentos.

-Finalizado lo anterior, empezar a pensar cuál va a ser la siguiente partida (Marvel o Arkham) y empezar a leer las instrucciones (o nuevas reglas) que se van a aplicar a esa partida.

Este proceso de clasificado funciona más profundamente de lo que parece, establecer este orden, de alguna manera, da orden a mi vida personal y laboral, donde muchas veces no puedes ser tan metódico. Es una sensación placentera porque consigue que tengas una cierta sensación de pulcritud (aunque, posiblemente, el resto de cosas no vayan tan ordenadas en tu ajetreada vida).

Tristán e Isolda: la eterna emoción

Hacía un tiempo que no escuchaba a Wagner, bastaron los primeros acordes del preludio de Tristán e Isolda para que me pusiera a llorar.

La música y, específicamente, la Ópera (música sacra, instrumental, etc…) especialmente me generan una respuesta emocional como casi ninguna de otras artes. Lo hablé alguna vez en este blog, es una especie de sintonía total con lo que escucho que provoca lágrimas de felicidad por estar disfrutando de algo inmenso, algo que me llena hasta el extremo.

Me ocurre con muchas óperas y obras de música clásica y con obras modernas, pero es cierto que me ocurre más con lo clásico. Y el caso de esta ópera de Wagner es sangrante. Empiezo a llorar nada más empezar y a lo largo de sus casi 4 horas (según versiones) no exageró si estoy 45 minutos llorando. Es un poco espectacular, sobre todo cuando estoy en el teatro, es bastante incómodo.

La música de esta obra universal tiene algo especial, esa sensación de infinitud, es minimalismo que se vuelve prácticamente místico. Cada personaje está tan bien escrito musicalmente y psicológicamente que abruma. Cada escena se me representa mentalmente cada vez que la escucho y cuando llega el Liebestod estoy rendido, devastado emocionalmente (sobre todo si está bien cantado).

No descarto que, precisamente estos días, por lo que comentaba antes de la relectura de Ketchum, me encuentre un poco más blandito emocionalmente pero da lo mismo. Siempre caigo con ella y qué maravilla poder rendirme así ante el arte cuando no puedes controlar lo que te pasa en la vida.

Cuidaos mucho

Un abrazo

Mutantes: al “rojo” vivo

Esta semana he generado yo mismo mi propio estrés personal, no queda nada para el día del libro y me gustaría sacar una lista de recomendaciones antes de que llegue el día. El problema es que ahora no sigo los tiempos que tenía antes cuando tenía la librería en Madrid y no puedo hacer dos pedidos al mes (o los que fueran necesarios), de ahí que componga la lista con lo que buenamente tengo y me ha llegado. La idea es llegar a 18 a 20 novedades interesantes pero las tengo que haber leído antes. Sólo tengo que leer uno al día hasta la semana siguiente. Lo que sí tengo claro es que tiene que salir la próxima semana.

Uno de los hábitos que comenté hace tiempo y que he vuelto a poner en mis rutinas diarias es leer a través del Marvel Unlimited, la maravillosa app de Marvel con la que se pueden leer todos los cómics que van saliendo. Lo habitual es que lea por la noche ya que se pueden agrandar lo suficiente los dibujos como para que no cueste leer tanto como los libros de papel y todos los días leo dos o tres cómics.

Gracias a ella estoy pudiendo seguir a mi aire las series de mutantes; la entrada de Jonathan Hickman fue un buen punto de partida ya que reseteó todo el universo mutante y lo dejó patas arriba con unas cuantas ideas bien conectadas. Hickman ha dejado ya jefatura mutante pero parte del status que produjo se sigue manteniendo por los siguientes guionistas. Como de costumbre, hay colecciones peores y mejores pero si hay una colección que sobresale con luz propia es X Men Red con guiones de Al Ewing con dibujos de Stefano Caselli (y otros).

La excusa de esta colección no es nueva: una facción de mutantes en otro lugar. Lo que sí es nuevo es que esté ubicada en el antiguo planeta Marte (ahora Arakko), preparado ahora para vivir, donde conviven los mutantes ya conocidos con los del antiguo Arakko. El grupo escogido también es bastante curioso, los conflictos con Tarn, Isca la imbatible y otros van desde luchar en la arena con ellos a que se produzcan todo tipo de conspiraciones. Los papeles de Roberto Da Costa, Tormenta o Magneto son algo totalmente diferente, especialmente interesantes son las encarnaciones de estos dos últimos, colosales. Incluso el quinto número del primer recopilatorio (su conexión con el sorprendente crossover con Vengadores y Eternos) me ha parecido excepcional, potentísimo y cruel, con imágenes poderosísimas como ese puñetazo brutal de Urano a Magneto. Sinceramente, no puedo pedirle más a esta colección (junto con Immortal X Men lo mejor de ahora mismo).

Qué maravilla que exista algo como el Unlimited, de otra manera sería imposible seguir tantas colecciones a la vez. La rentabilizo como nunca.

Pokemon Púrpura y las conexiones emocionales

Mi implicación con los juegos de cartas de las últimas semanas me había quitado tiempo para la Switch y no había avanzado el resto de juegos que tenía empezados. Aprovechando la Semana Santa he podido hacer las dos cosas a la vez y lo primero que he retomado ha sido el Pokemon Púrpura. Y qué bien poder terminarlo porque me ha parecido una historia maravillosa.

No he jugado todos los juegos de pokemon anteriores pero tengo que reconocer que esta versión mamarracha y divertida con muchos elementos ambientados en España me ha parecido muy redonda en cuanto a su historia (más allá de los famosos fallos en gráficos).

Probablemente sea por su conexión emocional, que a veces echaba de menos en otras entregas en hasta tres puntos concretos (posibles SPOILERS a partir de aquí):

-La historia del Team Star con el foco en el bullying.

-Los “daddy issues” de Damián y Turo.

-La relación de Damián con su pobre perro.

Por otra parte, la creación de los pokemon paradoja me ha parecido una pequeña maravilla argumental. Ya sólo me queda ir a por los legendarios y acabar la pokedex. Desde luego cogeré el DLC que sale a finales de año.

Otra vez los juegos de cartas

Me ha encantado fracasar en la primera campaña que hago con el Arkham Horror. Todo debido especialmente a que estoy aprendiendo y que la segunda parte de la campaña me salió de pena y lastró la tercera etapa. La elección de investigadores me dio la impresión de no estar equilibrada, de ahí que ahora haya empezado con “Malasombra” O’Toole y con la bibliotecaria Daisy Walker (pero, ¿POR QUÉ no la escogí al principio?) y tengo más claro cómo empezar a jugar con ellos. Lo que importa es que vaya aprendiendo y la primera parte esta vez me salió muy redonda. Quiero controlar el juego un poco más antes de ponerme con la primera campaña oficial: El legado de Dunwich.

Por otra parte me terminé el escenario de Mojomania con una épica partida contra Mojo en la que Ironheart y Wasp le patearon el culo a base bien un poco antes de quedarme sin cartas de encuentro (y perder la partida). Hay que reconocer que este escenario y todo lo que han sacado en mutantes está muy bien diseñado y es bastante divertido.

Lo cual me lleva a que desde Fantasy Flight Games se ha hecho un anuncio de la nueva campaña para Marvel Champions. NeXt evolution va a ser una campaña con Cable y Dominó y la Xforce de protagonistas y la verdad es que pinta maravillosamente. Además, han implantado un nuevo mecanismo según el cual los Héroes pueden poner en juego planes secundarios para mejorar sus características y me parece tremendamente interesante. Y parece que no se queda ahí, se han anunciado cuatro nuevos blísters de héroes (de X Force) que llegarán un poco más tarde y va a dar aún más variedad al asunto: Deadpool seguramente sea uno de ellos y falta ver qué pasa con los otros tres.

Viendo el ritmo de publicación de contenido de Arkham horror y Marvel Champions tiene pinta de que les va bastante bien. Yo no puedo estar más contento con ello.

La próxima semana no habrá carta, me voy a centrar en sacar la lista de recomendaciones para el día del libro.

Mientras tanto….

Cuidaos mucho Un abrazo

Siempre a vueltas con el terror

Hacía tanto tiempo que ni recordaba la última vez que fui al cine a ver específicamente una película de terror; me da la impresión de que alguna vez lo hice con mi madre, cuando estaba soltero en las sesiones de cine en las que aprovechábamos los días de espectador. Eso se me antoja una cantidad desorbitada de tiempo.

El pasado sábado me regalaron una entrada para ir a ver de estreno la sexta entrega de una de mis sagas favoritas: Scream. Tenía un poco de miedo, la quinta fue un intento de revitalizar la saga que se quedó a medias en prácticamente todo (a pesar de su éxito comercial). Afortunadamente fue un acierto mayúsculo, es mucho mejor que la quinta y pone la base para continuar en siguientes entregas. Destacaría lo siguiente como hechos que dan optimismo al respecto:

-La combinación de las dos hermanas (Jenna Ortega y Melisa Barrera) como Final Girls funciona, tiene química y sirve para tener dos tipos distintos de ellas (con la posibilidad futura de que Sam pueda acabar siendo como su padre).

-Se ha subrayado aún más el whodunit en esta entrega sin dejar de lado los elementos terroríficos y de slasher. El escenario escogido mucho más amplio (New York) me daba mucho miedo ya que Woodsboro (más contenido) parecía ser lo ideal para una película de este subgénero. La realidad es que no se consigue un slasher al uso, esto no tiene ya nada que ver con el comienzo de la saga pero está evolucionando a algo manejable y que trae diferentes sensaciones.

-El final es toda una herencia de las novelas de Agatha Christie, evidentemente no diré cuál porque cualquier avispado se daría cuenta antes de tiempo.

-POR FIN deja atrás la mayoría de los personajes originales, un cambio necesario y que refuerce aún más la sensación de legado. Espero que Gale ya no aparezca en la siguiente.

-Sigue igual de sangrienta, o puede que más que las anteriores. Aumenta el body count considerablemente, y…. ¡empuña una escopeta!

Y, además, me llevé una figura de Ghosface. Noche redonda.

Bestias, mis comienzos con Joyce Carol Oates

Gracias a Goodreads (la aplicación que utilizo para llevar mi biblioteca) recordaba que hacía más de diez años que leí el primer libro de Oates, no fue Bestias, sino A media luz, un libro descatalogado en Lumen que fue mi puerta de entrada. El segundo sí fue esta historia con la edición de la extinta editorial Papel de liar y supuso la confirmación de mi gusto por la autora.

Lo he dicho alguna vez, una de las mayores virtudes de Oates es su capacidad de cambiar de estilo y de género, siempre consigue adaptarse a la historia que está contando y metamorfosear su manera de contarla. En Bestias esta adaptación es más que patente, de ahí que el traductor/a tenga que saber reflejar esta circunstancia.

La nueva edición de contraseña con traducción de Pepa Linares me ha parecido fabulosa, refleja a la perfección el clima decadente y opresivo en el que se mueven los dos profesores y que les sirve para subyugar a sus alumnas y abusar de ellas. Y todo ello lo consigue dotando a cada frase de lirismo. Esa dicotomía arte-perversión está muy lograda y resulta, en la mayoría de las ocasiones, ciertamente poética. Trata temas muy duros de una manera muy sutil y desde el principio queda clara la naturaleza de los dos profesores: “Somos bestias, ese es nuestro consuelo.”

Espero que siga la buena racha y puedan traer alguna propuesta más de la autora con esta calidad de edición.

Ronan, defeated

Ronan ha supuesto mi primer momento para construir mazos, es la primera vez que lo he necesitado entre tres campañas y cuatro escenarios. Sin duda, para mí, “Los más buscados de la galaxia” en modo campaña (no cada escenario de manera individual) es el escenario más difícil de superar. Y lo es, sobre todo, porque vas heredando una serie de desventajas que, aunque intentes compensarlas comprando en la tienda, no resulta suficiente para la dificultad general.

Incluso utilizando a Gamora, una heroína completísima como ya he contado en alguna ocasión, tuve que cambiar algunas de sus cartas para encontrar una solución. Ronan es muy difícil porque la amenaza avanza rapidísimo y porque sus cartas de encuentro (siempre como mínimo dos de ellas…) tienen la palabra clave Oleada impresa con frecuencia (que hace que se muestren más cartas de encuentro). De ahí que, en la fase del villano, puedas recibir ataques descomunales (por el poderío de ataque de Ronan gracias a su lanza y la gema del poder cuando te la quita), o que te avance el plan a la siguiente etapa o incluso que recibas cuatro o cinco cartas de encuentro. Es insostenible.

Mi primer diseño fue reforzar las cartas con eventos de intervención, desde luego me sirvió para controlar la amenaza y para quitar planes secundarios molestos como el molesto Maniobra de pinza (dos aceleradores de amenaza), pero me di cuenta de que en cuanto cambiaba al alter ego para recuperar vida, el plan avanzaba tan rápido que ya no podía pararlo. La solución fue cambiar algún evento de justicia y complementarlos con alguno de defensa. Especialmente útil es uno del mazo del Doctor extraño que cura dos de vida y hace dos de daño al enemigo. Un bombazo.

Aún así, llegué a las dos últimas rondas justito, le acaba de quitar un montón de vida y me arriesgué a no cambiar a alter ego, tenía sólo 3 puntos de vida casi al final del turno. Quién iba a imaginar que mi salvación iba a ser un aliado, en este caso, además, uno que no he utilizado mucho: Angela. Este aliado tiene una característica especial, tiene coste cero a condición de buscar en el mazo de encuentros un esbirro para ponerlo frente a ti. El esbirro que puede sacar además tenía ataque veloz (de 1 afortunadamente). Llegué a la fase de villano con 2 de vida, el villano con 3. Tenía que sobrevivir para poder matarle en mi turno. Había vaciado la amenaza, el ataque del villano iba a ser brutal pero utilicé a Angela para defender ese ataque. De los dos esbirros que estaban enfrentados a mí, defendí uno de ellos. Me quedaba uno de vida. Había que desvelar dos cartas de encuentro. Era casi imposible.

La primera carta obligaba al villano a avanzar el plan… ufff… por ahora sobrevivía

La segunda carta era Fanatismo, se le asignaba con dos contadores de furia a Ronan pero sería para su próximo ataque, tenía oleada…. Había que sacar una más…..

La tercera fue un plan secundario: Corte de energía… no me dejaba quitar del plan por su icono de crisis. ÉPICO.

Tres cartas de encuentro y sobreviví. En mi siguiente turno le lancé un cañonazo de 3 de energía y lo derroté. De verdad, qué partida para el recuerdo.

Me temo que Espiral (en el escenario de Mojomania) me va a obligar a tunear otro mazo… ya os contaré.

Cuidaos mucho

Un abrazo

Rebalanceo del tiempo de ocio

Cada cierto tiempo me gusta evaluar cómo gasto mi tiempo de ocio, es un tiempo valiosísimo y quiero disfrutar de cada minuto y, en muchas ocasiones, entras sin querer en rutinas que no resultan tan satisfactorias como parecen. En momentos así, cambio varias de esas rutinas para optar por opciones que me satisfagan más. También puede ocurrir que actividades en las que gastaba antes mucho tiempo ahora no necesitan esa cantidad de tiempo que le dedico e igualmente me dedico a hacer cambios.

Estas modificaciones pueden ser de diferente índole. En el caso de los libros, hago cambios prácticamente a diario, mi pila de pendientes se va modificando según mis necesidades, ahora mismo, por ejemplo, mi prioridad es terminar mi última carretilla de adquisiciones y preparar comentarios para aquellos libros que pueden estar en la lista del día del libro. Se pueden intercalar lecturas entre medias pero la prioridad está clara.

Sin embargo, he decidido suprimir dos juegos de Tablet/móvil, siendo uno de ellos el archiconocido Marvel Snap, un juego entretenido al que he dedicado un montón de tiempo pero que se ha vuelto muy rutinario y dependiente de si pones dinero o no mensualmente para obtener las cartas de temporada para ganar. Demasiado “pay to win”. Prefiero retomar el Marvel Unlimited y ponerme al día de las colecciones mutantes después de la marcha de Hickman. Así sigo leyendo en inglés a diario (aparte de mi trabajo) y me dedico más al Marvel Champions (un juego más versátil y seductor en el diseño de personajes y escenarios).

A pocos meses de la llegada del Zelda: Tears of the kingdom voy a continuar con Pokemon Púrpura y Fire Emblem: Three Hopes. A partir de mayo la única prioridad va a ser el Zelda y tengo que terminar lo pendiente con el tiempo que dejo disponible para juegos de consola (noches de fin de semana).

Finalmente, los visionados, la llegada de la siguiente temporada de The Mandalorian y el nuevo operador de streaming Sky Showtime modifican mis visionados semanales y toca adaptarse a las nuevas circunstancias.

Habrá que ver si todos estos cambios resultan como deberían. Esta semana atípica servirá como prueba.

Agencia Lockwood

La verdad es que fue una sorpresa agradable descubrir que Netflix iba a adaptar la serie de Jonathan Stroud, tuve la oportunidad de leer los dos primeros libros de la saga hace ya unos cuantos años y me parecieron entretenimientos de alto nivel, con buena caracterización de personajes, sólido wordbuilding y, sobre todo, tramas inteligentes y emocionantes.

Mi mayor miedo, como de costumbre, era que la serie se convirtiera en el típico producto de la plataforma, indistinguible, sin personalidad, un producto estándar. Menos mal que Joe Cornish (Attack of the Block) se esfuerza en conseguir que no sea así. Para ello no hay nada mejor como tener un buen casting de jóvenes ingleses (con dicciones impecables: Ruby Stokes, Cameron Chapman y Ali Hadji-Heshmati) y realizar la presentación de “El problema” y todo su vocabulario de una manera sutil, sin que ahogue la trama. Trama que adapta de manera fiel con pequeñas modificaciones que le sirven para mantener la tensión en la pantalla, no hay que olvidar que, siendo dos medios distintos, hay que tener muy claro lo que puedes hacer con uno y con otro. Uno de mis temores era comprobar cómo iban a quedar las espadas en la serie y lo solventa a la perfección, consiguiendo que estén totalmente integradas sin resultar ridículas, más bien al contrario, le dan un tono antiguo y caballeresco mezclado con la situación moderna que resultan por momentos incluso épicos.

Me gusta mucho que hayan optado por adaptar dos libros para una temporada, a la vista del resultado obtenido, hacer un libro por temporada habría resultado en un relleno de elementos superfluos para una narración más monótona y, sin embargo, de esta manera le da tiempo a avanzar y resultar, sobre todo, tremendamente divertida. También es una declaración de intenciones, no parece vaya a querer estirar el chicle si tiene muchísimo éxito con esta temporada.

El resultado final es, en mi opinión, aún mejor de lo esperado y es muy visible para un publico amplio, dirigido especialmente a sesiones familiares, mi hijo está tan encantado como yo y le está sirviendo para afrontar sus miedos. Sólo queda comprobar si la serie sobrevive para que veamos las adaptaciones de sus siguientes libros. Cruzo dedos, más con el ritmo actual de cancelación de series.  

Gamora, posiblemente mi personaje favorito del Marvel Champions

Continúo mis sesiones con el Marvel champions. Por si alguien está interesado, machaqué a Cráneo Rojo con Ojo de Halcón, no hay nada como sacar a Goliath y lanzar un par de flechas de vibranium. La tiranía del cráneo rojo me ha parecido una gran campaña y posiblemente sea la más sencilla de las tres que conozco (ojo, dentro de un nivel de dificultad). Muy bien diseñada y con mucha personalidad de cada uno de los villanos, además de tener dinámicas distintas de juego. En modo experto será otro cantar pero eso será más adelante.

Y con ello he pasado a Los más buscados de la galaxia, la campaña cósmica que tiene como protagonistas a los Guardianes de la galaxia. El pack de la campaña viene con escenarios y dos nuevos héroes (Rocket Racoon y Groot). Empecé a realizarla con mi querido mapache pero, tras el segundo escenario con el Coleccionista decidí cambiar a Gamora. El motivo no fue otro que la dificultad del segundo escenario: muchos planes secundarios y pocas cartas para poder eliminar amenaza con Rocket y una peculiaridad: cada vez que una carta se descarta va a la Colección (no puede llegar a cinco cartas de esa manera o pierdes la partida) y este personaje precisamente descarta mejoras para ganar más cartas, haciendo casi imposible controlar tantos temas a la vez. Posiblemente mejore con un mazo de justicia (en vez de agresividad que viene por defecto) pero como ahora todavía no afronto la personalización de mazos, lo he dejado para más adelante. Queda poco, espero que para mi cumpleaños en abril lleguen el resto de cartas y pueda jugar full equipe.

De ahí la decisión de escoger a la grandísima Gamora, un personaje divertidísimo que permite utilizar hasta 6 cartas de eventos de ataque e intervención de diferentes aspectos para construir su mazo dotándola de una flexibilidad increíble. Sólo estoy utilizando los que vienen en el deck inicial y ya de esta manera es un personaje brutal, entre otras cosas porque, además, la primera vez que realices un ataque o una intervención puedes quitar uno de amenaza (Sutileza) y hacer uno de daño (Precisión) respectivamente. Esto sirve para quitar cartas de estado molestas en un santiamén y te ayuda a tener controlada la amenaza al mismo tiempo que atacas.

Lo mejor con ella es conseguir cuanto antes sus cartas generadoras de recursos de ataque e intervención (Instinto agudizado) que producen sinergias muy interesantes con cartas como Vapuleo (si es la primera carta jugada, no la descartas, esto sólo lo puedes usar si tienes los dos generadores de recursos sobre la mesa), también es muy útil tener Plan de Ataque, carta que sólo puedes usar en Alter Ego pero que te ayuda a recuperar un evento del fondo del mazo de descartes al mismo tiempo que recuperas un poco de vida. Gamora es un personaje que puede alternar entre alter ego y héroe con bastante frecuencia sin tener muchos problemas con esos cambios.

Lo mejor de todo son todos los combos que puedes originar con estas características: cartas tan tremendas como Devolver el golpe que sirven para defenderte de un ataque devolviendo al mismo tiempo daño y quitando amenaza (y luego su Sutileza y Precisión) u otras que funcionan mejor tras un evento de intervención como Golpe decisivo (de 4 a 7 de daño por esto). En fin, un personaje divertidísimo, dinámico y muy potente. Podría enrollarme con otras cartas pero no hace falta para que cojáis la idea.

Esta semana afrontaré el dificilísimo Ronan el Acusador, el último escenario de Los más buscados…. La próxima semana a lo mejor os hablo de ello y de las dificultades increíbles de esa campaña, o quizá no. Nunca se sabe por dónde tiraré y eso es muy bonito.

Cuidaos mucho

Un abrazo

El exceso como señal de identidad

La gente que me conoce suele sorprenderse por la variedad de mis gustos, sobre todo por el contraste que suponen; casi les da miedo comentar que una persona pueda disfrutar del rap, la ópera, la música sacra y Bad Gyal al mismo tiempo. Lo mismo sucede con los libros donde el abanico de estilos, temáticas y autores en el que me muevo es amplísimo desde el splatterpunk hasta Dickens pasando por la poesía. No he sido consciente de mi versatilidad hasta muy tarde pero, ahora mismo, la estoy aprovechando hasta extremos insospechados.

Me gusta pensar que el haber llegado a esta situación tiene mucho que ver con mi educación, siempre moderada y cabal, con educación en colegio católico toda la vida, originó una forma de afrontar la vida en la que no tenían cabida los excesos de ningún tipo. De ahí que, en la actualidad, es probable que esté compensando de alguna manera lo que inhibía en aquella época.

Todo esto viene a cuento de mi visionado (por fin!) de Scream Queens la serie perpetrada en 2015 por el productor, director y guionista Ryan Murphy; ya que, si quisiera definir al estadounidense con una palabra, podría utilizar perfectamente “exceso”. No sólo a la hora de crear un montón de shows televisivos sino por la manera, siempre desbordante, en la que los plantea.

Murphy parece no tener control a la hora de mostrar cualquier cosa, dándole lo mismo el tema, aun siendo temas sensibles. Sólo hay que ver la mezcla de slasher, comedia, lenguaje malsonante y todo tipo de situaciones grotescas y, por qué no decirlo, absolutamente delirantes con unas Jamie Lee Curtis, Emma Roberts, Abigail Breslain o Lea Michele…. totalmente desatadas, “mamarachismo” sin límites, tramas desopilantes y muchísimo humor negro. Como alguien dijo, es exactamente el tipo de serie que ahora mismo disfruto, mejor aún, caigo totalmente rendido.

Y desde luego, Murphy es tremendamente irregular pero, aún así, siempre consigue ofrecerme algo y, parece mentira, entre todo exceso, consigue emocionarme, en algunos casos demasiado porque cuando se contiene un poco es capaz de crear obras maestras como American Crime Stoy o Pose (amo esta serie sobre todas las cosas) y sólo por eso seguiré viendo todo lo que saque (o al menos lo intentaré porque es casi imposible….).

La primera carretilla del año

No hay nada como empezar el año libresco con otro montón de libros para unir a la pila infinita. Mi primera #carretilla es mucho más importante de lo que parece porque determina decisivamente cómo va a ir el año. Hay gente que me ha preguntado siempre cómo la diseño y no me importa ser transparente. Siempre miro en primer lugar las editoriales pequeñas/medianas, las independientes, aunque no deje de echar un vistazo a los boletines mastodónticos de las dos grandes monopolizadoras. Por temáticas me fijo inicialmente, por este orden, en terror, policíaco (detectivesco y novela negra), fantasía/ciencia ficción… y el resto. Este tipo de criterio se aplica a lo que más te apetece en cada momento, puede variar mes a mes por causas diversas. Mi idea este año es leer cada #carretilla completa siempre y utilizar las lecturas que más me hayan gustado para mis listas. La próxima será la del día del libro.

De esta manera se puede ver claramente que mis elecciones tienen que ver mucho con esto y son perfectamente comprensibles, lo único que se sale de lo que he comentado es que empiezo el año con más ganas de las habituales de leer ensayos, de ahí la presencia de Klosterman, Vernon Lee y Kristin Kobes Du Mez. En el camino han caído ya algunos y me ha parecido especialmente interesante Hotel Splendid de Marie Redonnet.

“El Splendid se refleja en la nieve con sus letreros encendidos a medias. Las letras se inclinan, como el hotel. Parece que estemos en un barco. De lejos, el Splendid debe de parecer un barco encallado en la nieve, con su casco de madera medio podrida. No hay ninguna posibilidad de que se hunda porque está encallado.”

(el texto viene de la traducción de Hotel Splendid por Rubén Martín Giráldez)

Una narración que se sustenta en un estilo sencillo, de frases cortas de gran pulcritud, encuadrado en un minimalismo que recuerda a Beckett o Ernaux y que refleja de una manera muy onírica cómo un hotel se puede convertir en un purgatorio para aquellos que lo regentan. El único vestigio que sobrevive ante la calamidad, ante la fatal inclemencia del paso del tiempo. Una obra corta pero especialmente hermosa en su contención.

Lo divertido que es usar a Ojo de Halcón en el Marvel Champions

Ojo de Halcón ha sido siempre uno de mis personajes favoritos (mejor el de los cómics que el de las películas, sin duda) y, aprovechando que en la campaña de La tiranía del cráneo rojo (una de las cinco campañas disponibles a modo de expansiones de la caja inicial) venía el personaje, me decidí  a pasarme toda la campaña (cinco misiones) con él. El diseño del personaje es maravillosamente realista y acorde a lo que he leído toda la vida. No tiene muchos puntos de vida (9 es el límite menor para los personajes con menos fortaleza). Sus características de intervención ataque y defensa son normalitas (1-2-1). Para conseguir su arco hay que gastar un recurso y se puede preparar desde el inicio pero es imprescindible porque si no no puedes utilizar las flechas que irán saliendo y además ganas +1 al ataque además de adquirir el maravilloso rasgo A distancia que evita represalias de los enemigos.

Con estas características, se trata de un héroe de un ataque más que aceptable pero de cristal, y encima se defiende regular y  no consigue frenar los planes de los villanos. Es todo un reto. Pero un reto sumamente divertido. La estrategia con él viene de conseguir rápidamente sus cartas de recursos gratuitos para flechas y el carcaj, una carta maravillosa que te permite consultar las próximas cinco cartas y si hay un evento flecha ponerlo encima de él. De esta manera, en cada turno se podrá disponer de la flecha más adecuada para las circunstancias en las que te encuentres: Vibranium para quitar mucha ficha y estado duro, sónica para confundir y hacer daño, eléctrica para aturdir y hacer daño, explosiva para dañar también a los esbirros o de cable para quitar amenaza.

Por otra parte el aspecto de liderazgo le ayuda especialmente para quitar amenazas y protegerse de ataques indeseados, Goliath es una bestialidad que quita dos de amenaza a poco coste y que puede servir para hacer un último ataque bestial antes de desaparecer, y luego están Kate Bishop, John Walker (UsAgente) o, naturalmente, Pájaro Burlón.

Sin hacer ningún tipo de personalización he pasado las primeras cuatro etapas de la campaña y ahora toca el último reto, el más difícil: Cráneo Rojo. Habrá que ver cómo consigo neutralizarlo pero tiene pinta de ser más que divertido.

Os dejo, últimamente no cambio de mucho musicalmente hablando, estoy escuchado en bucle la Sunrise Mass de Gjeilo de la que os hablé en mi anterior carta. Me va a costar cantarla sin emocionarme.

Cuidaos mucho

Un abrazo

Traitors, mi vuelta a los “realities”

Este es un tema que no hablaré con frecuencia en estas cartas, entre otras cosas porque no suelo seguir “realities”; no por ninguna razón especial, simplemente porque me aburro viéndolos, me da la impresión de que cambian de escenario para hacer prácticamente lo mismo y la mayoría de las veces dependen de unos factores que no suelen ser de mi agrado.

Dicho esto, después de cuatro episodios estoy oficialmente enganchado a Traitors España, menos mal que sólo son ocho; todo comenzó cuando me enteré de la premisa de partida, la idea reunir a un grupo de personas, elegir a un grupo de traidores y que vayan eliminando al resto me parecía potencialmente interesante. No lo puedo evitar, el misterio siempre me ha atraído, hasta con estos formatos.

Sergio Peris Mencheta (Al salir de clase vibes) es el maestro de ceremonias y proporciona empaque sin resultar intrusivo, no hace falta, los concursantes se las arreglan muy bien solos para ser intensos, me gusta que permanezca en un segundo plano a modo de narrador. Después de los dos previsibles primeros capítulos: echar a Cristina Cifuentes (para mí, un error de casting) y descubrir al primer traidor (el exageradamente intenso Rubén Ochandiano) dieron paso a un escenario totalmente distinto y, al final del cuarto programa, destaca especialmente la figura de Leo Margets (la jugadora de póker) como verdadera conspiradora y carismática capaz de hacer mover la opinión del resto, ese tipo de jugadora que tiene una intuición innata y es capaz de intentar hacer un trato con un posible traidor para llegar al final del programa. Qué necesaria era esa aparición porque tengo que reconocer que me sorprendía mucho cómo, siendo tantos, cada momento del destierro se centrara prácticamente en dos figuras, con cada votación. ¿Cómo es posible que se forjen todos una opinión tan clara en un día? La brevedad de lo emitido es un pequeño lastre a estas cavilaciones, no hay que olvidar que sólo se trata de una hora por capítulo, cada hora resume un día completo y eso resulta escaso para el telespectador a la hora de forjarse una opinión.

Aún así, el programa lucha contra una edición regulera (a la hora de escoger lo que muestra a los espectadores) añadiendo elementos que son sólo conocidos por el televidente (la identidad de los traidores, la posibilidad de reclutar nuevos traidores, la identidad del personaje que gana un escudo y no puede ser eliminado…) todos estos elementos aligeran el hándicap de no poder asistir a todo el día. Una prueba diaria, por ejemplo se queda muy muy corta y creo que podrían estar mejor trabajadas.

Sinceramentete, este tipo de formatos me parecen un camino a seguir, con posibles modificaciones que lo hagan aún más potente: mostrar más tiempo del día para poder hacerte una opinión de lo que ocurre o incluso dejando a los telespectadores votar a la hora de desterrar (o incluso asesinar…), requeriría un guión distinto (no podría comportarse como un observador omnisciente, tendría que saber lo mismo que los concursantes) pero podría ser realmente divertido.

¿Para cuándo un slasher o un survival televisivo?

EDIT: Gracias mi querido Jónatan, evidentemente me entero que intentos ha habido: Conste que intentos de programas de terror/ slasher en ese formato ya ha habido. Otra cosa es que funcionaran mejor o peor. Pero a mí “The traitors” me recordaba mucho a “Killer Camp”, pero está también “Escape the night”, de “Whodunnit” seguro que te acuerdas, y he hablado un par de veces de “Murder in Small Town X” que se llevó por delante el 11/S. Así que intentos ha habido.

No hay nada comparable a que te sigan los mejores

Los Living Card games: Marvel Champions

Ya hablé en mi primera carta de lo bien que me lo estaba pasando con el Marvel Champions y me gustaría describir un poco cómo funciona este juego. Se trata de un Living Card Game diseñado por Fantasy Flight Games, una de esas editoriales especializadas en este tipo de juegos que tiene un montón de propuestas para replicar escenarios bien conocidos (Superhéroes,  El señor de los anillos, Lovecraft, etc….). Siempre me han atraído los juegos de cartas pero clásicos del estilo de Pokemon o Magic tienen demasiado a sus espaldas, tienes esa sensación de que, hagas lo que hagas, te vas a quedar corto con ellos (el caso de Magic es especialmente sangrante en este sentido).

Lo bueno de estos Living Card games es que no llevan tanto tiempo y, aunque tienes que hacer una buena inversión para tener todo lo que han sacado hasta ahora, se puede disfrutar desde el minuto uno con inversiones más modestas. Además, al estar vivos, las reglas se pueden ir modificando según se sacan expansiones, resulta sencillo adaptarse al juego para jugar de una manera sencilla (aunque si se quiere dominar necesita mucho trabajo, como todo). Ese es el propósito de la caja inicial, cinco héroes (Spiderman, Capitana Marvel, Hulka, Iron Man y Pantera Negra) y tres villanos (Rhino, Klaw y Ultrón) que se pueden jugar en modo normal o experto y con diferentes conjuntos modulares que se pueden añadir para hacerlos un poco más difíciles.

Las reglas de inicio son sencillas se manejan dos mazos de cartas: por un lado el del héroe/heroína que tiene una serie de cartas específicas y únicas y que se rellena con cartas básicas y de un aspecto a elegir entre cuatro (Agresividad, Protección, Justicia, Liderazgo) que originarán formas de jugar totalmente distintas (centradas en el ataque, la defensa, quitar amenaza o jugar aliados); por el otro lado un mazo de encuentros que serán las cartas que maneja el enemigo al que hay que derrotar en dos formas (1 y 2 si es modo normal, 2 y 3 en modo experto) y un plan principal que no se puede completar.

Aparentemente puede ser sencillo pero dominarlo es mucho más complejo de lo esperado, cada villano, cada héroe está diseñado con todo el sentido del mundo y son divertidísimos pero también hay que adaptarse a cada nuevo escenario. Es todo un reto. Y más aún porque, cuando se tienen muchos mazos con nuevos héroes puedes diseñar tu propio Deck para que tu héroe se convierta en una bestia. Otro día hablaré de algunos de estos diseños y por qué me gusta tanto utilizarlos, y de las campañas y escenarios. Extensiones imprescindibles para sacarles todo el partido

Me sigue dando tiempo a leer

Por fin tengo la sensación de ir tranquilizando mi ritmo, de quitarme esa urgencia que tenía el año pasado; y disfruto mucho y no hace falta leer uno al día. Eso era inviable. Estoy ahora mismo con el último de Karen M. McManus, y de nuevo es fantástico, esta vez se centra en la voz de dos de los protagonistas para cambiar de punto de vista y los saltos al pasado son esporádicos, centrándose más bien en el presente (sin perderlo de vista) y vuelve a funcionar a la perfección: una lectura ágil, entretenida y con la suficiente dosis de misterio para que hagas tus propias cábalas, es una autora excelente.

Cuidaos mucho y hasta la próxima carta

Un abrazo