Febrero, Marzo y Abril 2017. Listado de lecturas

Este post es una consecuencia real de mi tendencia a la entropía de los últimos meses. Normalmente suelo hacer un post con todas las lecturas del mes y, en esta ocasión, el retraso me ha obligado a unir tres meses. Lógicamente hay otra consecuencia de esta situación: no poder hacer comentarios demasiado extensos de cada uno de ellos. Por lo menos puedo asegurar que dejar de leer no lo hago, otra cosa es que me dé tiempo para escribir sobre mis lecturas. El caso es que, a continuación os paso el listado:

Eileen de Ottessa Moshfegh, lo leí en inglés y tengo que reconocer que el libro funciona bastante bien, muy entretenido y con una cierta calidad. También es cierto que, por muchas nominaciones de premios que haya recibido, sigo pensando que Gillian Flynn está bastante por encima; aun así, fue una lectura interesante. 

El azor en el páramo  de Ted Hughes, la influencia de la tormentosa relación con Sylvia Plath, de la que siguen saliendo detalles escabrosos (y cada vez más truculentos, el maltrato fue evidente), está minando en el tiempo el valor de la poesía de un autor único. Esta selección que se reunió en Bartleby es alucinante, qué potencia, qué salvajes son los versos de este autor y qué placer leerle.

El lagarto negro  de Edogawa Rampo, recomendé esta reedición en Canino y no me equivoqué. Una historia estupenda con un detective tan peculiar como es Akechi y un regusto pulp divertidísimo, con metarreferencias a sus propias obras de terror. Qué bien, cada vez tenemos más Edogawas disponibles.

Los vengadores costa oeste 3: perdidos en el tiempo de Steve Englehart y Al Milgrom, sigo mi recuperación de esta época y, posiblemente, sea el que más me ha gustado. Me encanta este heterogéneo grupo liderado por Ojo de halcón.

Un asesino en escena  de Ngaio Marsh, otro de los libros que recomendé  en Canino y un verdadero disfrute. Segundo de los libros recuperados de la escritora neozelandesa en la colección clásica que ha sacado Siruela que tiene como protagonista a Roderick Alleyn y que demuestra, sin lugar a dudas, el dominio de la escritora además de mostrar las características que van a ser comunes a su obra; sobre todo, su relación de lo detectivesco con lo teatral.

Dame tu corazón  de Joyce Carol Oates, es fantástico el trabajo de editoriales como Gatopardo que se atreven a sacar autores que los grandes sellos tienen olvidadas; tal es el caso de la escritora estadounidense y está grandísima recopilación de cuentos cortos que recomendé en Canino y de la que quiero escribir algo más adelante.

Estanque de Claire-Louise Bennett, no entiendo muy bien lo que me ha pasado con este libro, suelo disfrutar de las antologías de cuentos pero hay algo artificial en todas estas historias. Achaco los problemas a una traducción deficiente pero no descarto que no fuera tampoco demasiado interesante en su lengua original. El caso es que es el peor libro de los últimos meses.

Prosas reunidas  de Wislawa Szymborska, hablé de ella aquí mismo. Si pincháis en el enlace podéis encontrar más información. Imprescindible.

Había mucha neblina o humo o no sé qué: Caminar con Juan Rulfo  de Cristina Rivera Garza, original el enfoque de la escritora mexicana a la hora de acercarse a la obra de Juan Rulfo, no es un análisis estilístico de su obra, tampoco una biografía, más bien es una exploración de su obra en la propia persona. Vale la pena acercarse a él para comprobar una manera diferente de narrar. También la puse en la recopilación de Canino para empezar el año.

Lamu: Urusei Yatsura 5  de Rumiko Takahashi, sigo avanzando/disfrutando de la obra de la autora japonesa. Que no pare la diversión.

Mi prima Rachel  de Daphne du Maurier, uno de esos thriller psicológicos clásicos que está recuperando con mucho acierto Alba en su sello Rara Avis. Du Maurier es una escritora excelente con un gran manejo de la tensión a lo largo de la trama. Es un clásico de las recomendaciones caninas.

Mi individualismo y otros ensayos  de Natsume Soseki, vaya cuatro ensayos que ha recuperado Satori por el 150 aniversario del nacimiento del autor japonés. Tenéis más información sobre él en el enlace del título.

Los niños perdidos  de Valeria Luiselli, estoy seguro de que, en no mucho tiempo escribiré algo más extenso sobre este fantástico libro. Permaneced atentos a las pantallas.

La sonámbula y más relatos inquietantes  de Marie Luise Kaschnitz, esta autora vale muchísimo la pena y esta recopilación vuelve a dar en la diana de la inquietud. Más información pinchando el título. 

Un policía en la luna  de Tom Gauld, pequeño cómic que aprovecha el pretexto de una situación poco convencional (la vida de un astronauta policía en la luna) para presentar una situación cotidiana en nuestras vidas: la búsqueda de la identidad y la relación con las personas así como sus dificultades. Más allá de su facilidad de la lectura, los dibujos de Gauld son muy expresivos para mostrarnos la situación. Es un disfrute.

Lamu: Urusei Yatsura 6  de Rumiko Takahashi, se lee poco a Takahashi, y es una pena.

Según venga el juego  de Joan Didion, tras la impactante lectura de El año del pensamiento mágico me propuse leer todo lo que viniera de ella; esta novela, corta, formada por retazos de la vida de una actriz en Hollywood, no es como aquella pero, indudablemente, se lee con bastante interés. Supone una razonable indagación de la identidad del individuo actual y las consecuencias del liberalismo desenfrenado.

El Azor  de T. H White, aquí está la historia que inspiró el grandísimo H de halcón de Helen MacDonald ; espero escribir algo más sobre él en poco tiempo pero ya digo que vale la pena.

Querida Ijeawele  de Chimamanda Ngozi Adichie, qué sencillo lo hace Chimamanda; un pequeño libro de consejos para ser feminista en un mundo como este, de ella a una madre y su hija; no hay forma de endulzarlo porque, ante todo, la autora se muestra sincera y firme en cuanto a lo que se puede encontrar. La verdad es que da envidia que pueda haber esto a estas alturas. Ojalá hubiera tenido algo así para aprender cuando era joven.

A propósito de las mujeres  de Natalia Ginzburg, antología de relatos de la autora italiana que vuelve a demostrar lo bien que escribía; una cosa buena de las efemérides es, desde luego, la posibilidad de darla a conocer y se está cumpliendo a la perfección.

Las aventuras agrícolas de un cockney  de Virginia Woolf, dos historias muy tempranas de una joven Woolf; sinceramente, esto es más para completistas de la autora, los dos relatos se dejan leer pero no aportan mucho más que no se supiera.

Bitch planet 1 de Kelly Sue DeConnick, me gusta siempre tener algún cómic a mano… y en esta ocasión me venía de perillas esta pasada. Una dixtopía bastante macarra que juega con muchos factores relacionados con el feminismo, racismo, etc. y que, más allá de ello, es un gran cómic y bastante bien dibujado.

La visión, Vol.1: Visiones del futuro y Vol.2: Poco mejor que una bestia  de Tom King, impresionante propuesta, se me había quedado en el plumero y encontrarla ha sido impactante; la historia que propone  el autor Tom King profundiza en la identidad del sintozoide convirtiéndolo en un método para indagar en su construcción de la identidad individual y social de cualquier individuo y, este caso, reflexionar sobre el papel de las inteligencias artificiales.

Un mal principio de Lemony Snicket, las originales aventuras de los hermanos Badelaure vuelven a vivir una reedición; aprovechando la realización de la serie en Netflix, en Montena (el sello infantil-juvenil de PRMH) han decidido empezar a sacar de nuevo todas sus historias que, principalmente, se caracterizan por acercarse de una manera diferente a la habitual.

El unicornio de Iris Murdoch, tengo pendiente escribir de una vez algo sobre ella. O sea que toca esperar hasta que llegue dicho momento. 

La habitación de los reptiles  de Lemony Snicket, segunda entrega prácticamente sacada al mismo tiempo que la primera. Basta decir que mantiene un nivel suficientemente alto para seguir disfrutando. De cabeza a por ella.

Los Vengadores Costa Oeste Vol.4: El ataque del Zodíaco  de Steve Englehart y Al Milgrom, continúan las aventuras del grupo liderado por el arquero, continúa la diversión salpicada de alguna reflexión interesante de tipo ético, sobre todo las consecuencias de la decisión de Pájaro Burlón.

Black Panther: A nation under our feet  Vol. 1 y Vol.2 de Ta-Nehisi Coates, esperaba mucho de Coates en esta nueva encarnación de Pantera Negra y… sinceramente… me ha dejado un poco frío el resultado final. Me da la impresión de haber leído este tipo de aventura muchas veces y, desgraciadamente, contado de mejor forma. No me añade nada nuevo y, peor aún, me aburrió en algunos momentos, incluso algo peor: no me causa ninguna impresión.

Houston, yo soy el problema de Óscar García Sierra, tras sucesivas recomendaciones por tuiter me atreví a acercarme al libro del escritor español y tengo que reconocer que la experiencia ha sido muy agradable. La propuesta de Óscar García Sierra es muy original al juntar referencias actuales y hacer poesía con ellas. La única pega que le puedo encontrar es que, al estar tan anclada en ellas, puede envejecer demasiado deprisa. Aun así, vale la pena disfrutarlo.

Las ratas de James Herbert, me fui de casa rural y lo que más me apetecía era el terror, este libro fue mi primera elección, todo un clásico británico de las novelas de bichos, centrándose en este caso en unas ratas hambrientas de un tamaño descomunal, encantadoras. Sigue un desarrollo clásico y predecible pero, igualmente, se lee muy bien ya que mantiene la tensión de los protagonistas cuando luchan con los bichines. Toda una declaración de intenciones  de la nueva editorial de terror Biblioteca de Carfax.

Los sauces de Algernon Blackwood, otro relato de corte clásico excepcional es el que nos trae por primera vez Hermida Editores al recuperar este texto del gran escritor inglés. Todo una fabulosa muestra de cómo se crea un ambiente claustrofóbico que rodea toda la narración y a sus protagonistas. No hace falta muchas veces que sea un terror palpable, hay más miedo en lo indefinido potencial.

Escuela de sangre de Sebastian Fitzek,  escrito bajo el pseudónimo del escritor alemán Max Rhode, esta propuesta de terror es totalmente distinta a lo que dice la sinopsis argumental; caso curioso en el que el lector potencial puede sentirse engañado al esperar otra cosa. Me gusta más lo que no se cuenta que lo que se contaba, ya que parte de un hecho sobrenatural que desencadena lo que se dice en la sinopsis, no pasará a la historia pero es, por lo menos entretenido.

Histopía de David Means, gratísima sorpresa con un libro que, en un principio, no pretendía leer y que, finalmente, tuve que recomendar para mi selección de Canino del día del libro uno de esos ejemplos en los que el “cómo” es más importante que el “qué” (nuevamente la guerra de Vietnam).

Mujer en punto cero de Nawal El-Saadawi, me habría gustado escribir algo más sobre esta fantástica novela, vale la pena acercarse a ella ya que la egipcia utiliza la ficción para mostrarnos la vida de Firdaus, una vida llena de abusos que puede encuadrarse, sin problemas en la realidad, como si de un ensayo se tratase. Es corta pero intensa y de gran dureza pero siempre clarificadora.

La dama desaparece de Ethel Lina White, maravillosa recuperación de Alba en su sello Rara Avis que recomendé sin dudar en Canino  y que hará las delicias de todo aficionado al género policíaco y al suspense.  No me extraña que Hitchcock la cogiera como idea para una de sus películas, es un thriller donde lo psicológico tiene una importancia primordial sobre la investigación y está muy bien dosificada a nivel de tensión.

Gorda de Moyoco Anno, buen cómic este realizado por Moyoco  Anno en el que se presenta una de las obsesiones actuales: la gordura. Una obsesión que suele minar la confianza de las personas y, sobre todo, su amor propio. La forma en que se presenta y el dibujo “feísta” (aunque muy expresivo) ayudan a entrar en el tema y comprender aún mejor un tema que preocupa a toda la sociedad, no solo la japonesa.

Magia Cruda de Paul Alexander, se está dilatando en el tiempo la reseña de esta fantástica biografía, pero prometo que llegará en algún momento. Atentos a este blog.

Piercing de Ryu Murakami, ahora puedo decir que me gusta Murakami, el “otro” Murakami, Ryu. Esta novela es fascinante… qué manejo de la potencialidad, de aquello que puede ocurrir. Qué personajes. Qué lástima que sea tan corta.

En el medio de la muerte de Lawrence Block, parece que, todavía, RBA conserva los derechos de Block en España, uno de los pocos que le quedan. (Momento de nostalgia para recordar la fenecida colección de novela negra). Lo extraño es que este volumen es el tercero de la saga de Scudder y han salido unos cuantos posteriores y resulta difícil encuadrar el momento del investigador. Además, siendo una novela primeriza, estando bien, pierde un poco con la comparación. Independientemente de todo esto, es una buena novela, porque Block es un gran novelista policíaco pero, si alguien lo descubre con este título que no se lleve a engaños, no es lo mejor ni de broma.

Canción dulce de Leïla Slimani, leo pocos autores franceses, de ahí que tuviera reticencias con esta novela inicialmente; menos mal que me tiré a la piscina porque la propuesta es muy interesante, en efecto se produce un crimen (de gravedad, se trata de niños), pero no importa tanto la investigación como la forma en que se ha llegado al crimen. Hay una indagación por parte de la autora de los motivos  que pueden causarlo desde el punto de vista psicológico así como la parte relativa a la sociedad. Es otro punto de vista, y enriquece lo habitual.

Alfa, Bravo, Charlie, Delta de Stephanie Vaughn, la única recopilación de relatos de la autora es un buen ejemplo de cómo mostrar, a través de cuentos, las preocupaciones de la época en la sociedad estadounidense.

Laura de Vera Caspary, clasicazo policíaco donde los haya. Sin complejos, una historia con sabor negro.

El ventanal de Lemony Snicket, ¡viva Lemony Snicket! ¿Lo he dicho antes?

El señor de las muñecas y otros cuentos de terror de Joyce Carol Oates, de este va a haber reseña, es un libro de relatos excepcional, nuevamente, este año dos libros de la autora y a cuál mejor. Es difícil escoger uno de ellos.

Cáscara de nuez de Ian McEwan, McEwan haciendo lo que más le gusta, ser él mismo. La excusa de utilizar un narrador diferente es un simple pretexto para incorporar sus ironías y reírse un poco de todo. Además incorpora una cierta trama policíaca y, como de costumbre, resulta muy entretenido. No es lo mejor, pero es divertido.

Amor libre de Ali Smith, nuevamente Gatopardo dando en el clavo, me ha convencido bastante esta recopilación de cuentos de la escocesa. Visiones distintas del manido tema del amor realizadas con mucha delicadeza, humor y buen gusto.

Los cinco y yo de Antonio Orejudo, me encanta Orejudo, es uno de mis escritores españoles favoritos pero, sin duda, esta es su peor novela con diferencia. Sobre todo si piensas en las primeras, como la excepcional Fabulosas narraciones por historias (enlace a reseña) de la que hablé aquí con no pocos elogios.  De todos modos, si solo fuera eso… pero no, noto al autor quemado, desencantado, decepcionado con la literatura, con el propio hecho de escribir y eso, de verdad, me apena. Espero que solo sea un bache.

El otro hombre de Hugh Walpole, bien por Defausta que se lanzan a una nueva colección de novela negra y empiezan con dos obras curiosas. Esta de aquí es el primer título y, aunque no es una investigación propiamente dicha, se agradece que aparezca una novela del autor por aquí.

Los casos del detective Kogoro Akechi de Edogawa Rampo, tengo pendiente reseña y puede que algo más. Atentos al blog.

Guardianes de la Galaxia: Vengadores Cósmicos de Brian Michael Bendis, entretenida recopilación (y voluminosa) que pretendió lanzar en su momento a los Guardianes de la Galaxia gracias al (inesperado) éxito de la primera película. No está más desde luego, pero no es lo mejor de Bendis que, desgraciadamente, es muy reconocible por sus tics.

El perro espectral: investigadores de lo oculto de Alice Askew y otros, excelente recopilación reunida por Arellano para su Biblioteca del laberinto. Empieza flojo pero van mejorando los relatos (cronológicamente) mostrando muchas facetas y muy variadas de diferentes investigadores de lo paranormal. Da gusto encontrar un libro tan distinto y entretenido.

Black panther: A nation under our feet. Book 3 de Ta-Nehisi Coates, me temo que tengo que seguir hablando de las mismas sensaciones que tuve con los dos primeros volúmenes, y eso significa que ya toca abandonarla. Mala suerte.

Ultimate Spiderman HC vol1 de Brian Michael Bendis, me acuerdo cuando se lanzó el sello Ultimate en Marvel, la idea era montar nuevas colecciones de los héroes más emblemáticos partiendo desde cero y así evitar todas las cargas de la continuidad a la hora de buscar nuevos lectores; la idea era divertida y tuvo dos puntas de lanza evidentes. Una fueron los impactantes Ultimates, unos vengadores de nivel extremo dibujados por el increíble Bryan Hitch y guionizadas por Mark Millar que buscaban “hacerlos adultos” (tacos, violencia..) pero que, independientemente de los postureos, ofrecían historias muy entretenidas y espectacularmente dibujadas. El otro buque insignia fue, sin lugar a dudas, el Ultimate Spiderman de Bendis y Bagley, revisándolo tras varios años sigue funcionando a la perfección: Historias dinámicas, divertidas, juveniles, llenas de acción, diálogos más comedidos de Bendis y un tratamiento idóneo del conflicto juvenil. El dibujo de Bagley era perfecto para hacer buenas escenas de acción y se acercaba a la caricatura. La mezcla es consistente y no decae durante estas primeras 300 páginas, ¡qué divertido!

Y eso es todo, no he contado el número de libros pero ha sido cuantioso. El caso es que he disfrutado mucho.

A continuación os pongo las fotos de las #carretillas de esos meses que conseguí (como siempre) en La Sombra, mi librería y libreros favoritos.

Y eso es todo… más de 3000 palabras, hay que cortar ya.

Un abrazo y ¡buenas lecturas!

“Los libros del 2011 que más me gustaron”

Aprovecho el momento, casi fin de año, para recuperar la recopilación de los libros que más me gustaron que hice el año pasado y así luego referenciaré a los de este año. Así que, sin más dilación, aquí está:

Estamos en el momento, final de año, llegan las tan temidas listas, listas de todo lo que ha ocurrido durante el año: lo peor, lo mejor, lo más divertido, lo más popular… tenemos para todos los gustos. Dentro de este “subgénero” están, naturalmente, las listas de libros, que suelen ser aún más monótonas que el resto, por la sencilla razón que las hacen los críticos y nunca coinciden con los gustos de la mayoría, huyendo de los best-sellers como si fueran la peste. Curiosamente mucha gente las sigue y se pueden llegar a decidir por comprar libros un poco diferentes de lo habitual.

A nivel editorial  ha habido de todo, en primer lugar es de destacar la irrupción a mayor escala de los lectores de eBooks, sobre todo con el lanzamiento justo antes de Navidad del muy conocido lector de Amazon en España, si a eso sumamos que, tanto la Casa del Libro como la Fnac han sacado sus propios lectores con precios bastante competitivos, entonces estamos hablando de un verdadero avance; mucha gente va a comprar lectores de eBooks estas navidades y los va a complementar con tablets, que van a ser, probablemente, el regalo estrella. Las editoriales están, sin embargo, actuando con cautela y lentitud, el fondo editorial sigue siendo pequeño y el precio poco ajustado, originando  que los lectores que compraban libros de papel no inviertan en electrónicos ya que los pueden conseguir por otros medios. En cualquier caso, el 2012 puede ser un punto de ruptura que habrá que seguir.

En segundo lugar, en cuanto a la publicación en papel, las grandes editoriales siguen siendo bastante conservadoras en su catálogo, sacan libros de todo tipo en multitud de sellos e intentan asegurar beneficios, así tenemos el caso de Random House Mondadori y Planeta, es reseñable la maravillosa y completísima colección de novela negra de RBA que se ha estabilizado definitivamente y está sacando de todo: nuevas novelas, clásicos, reediciones, etc. Más interesante ha sido el año en el caso de las editoriales más pequeñas, que arriesgan e intentan hacer algo distinto, apuestas como las de Alpha Decay o Blackie Books son interesantes, abogan por autores jóvenes en el caso de la primera o libros diferentes en el caso de la segunda. Te puede gustar más o menos pero hacen algo innovador y, a veces, aciertan con alguna joya desconocida. Ha habido otras tantas de este estilo que están siendo, además de acertadas, más regulares, como por ejemplo Impedimenta con un listado delicioso  y una edición muy cuidada, o Libros del Asteroide, Sajalín Editores, Nevsky Prospects, Valdemar, EsPop ediciones, Salto de página, Papel de Liar, Ático de los libros, etc… que están publicando un catálogo más reducido pero de una calidad indudable. Como siempre, la literatura de género en sus variantes de terror y ciencia ficción está un poco abandonada, saliendo sólo lo menos arriesgado, pero bueno, confiemos en que el año que viene vaya un poco mejor y que se anime alguna más aparte de Valdemar.

Después de todo esto entremos en faena, ¿cuáles son los libros más cool que hemos tenido en este año 2011? Cool puede aplicar a lo que queramos, así que la lista puede tener best-sellers, reediciones, libros de otros años, clásicos… y con mi único criterio personal. Espero que os guste.el-ultimo-buen-beso_james-crumley

“El último buen beso” de James Crumley. RBA comenzó el año a lo grande con la recuperación de esta novela. “El discurso intelectual está muy bien tío, pero en mi negocio lo que abunda es la violencia y el dolor”, así se las gasta C.W. Sughrue, el atípico (ex militar, alcohólico, drogadicto y mujeriego) buscador de personas desaparecidas. Tenemos aquí una novela negra muy dura donde la sociedad, en franca decadencia, aparece relatada con toda la sordidez y amargura de la que es capaz: las consecuencias de la guerra, el mundo de la pornografía, las venganzas, las relaciones malsanas, los vicios,.. eso sí, con una prosa muy muy elegante. Esto es literatura, sin más, te gustará si te gusta leer un buen libro, independientemente de si es de género o no. Un clasicazo que no nos vamos a cansar de recomendar.solaris

“Solaris” de Stanislaw Lem. Lo de la editorial Impedimenta es tan colosal que siempre nos quedaremos cortos. En este caso cogieron el clásico del escritor polaco y reeditaron, en nueva traducción directa desde el polaco,  por primera vez la imprescindible obra de ciencia ficción. Una obra que va más allá de la ciencia ficción, representando con toda claridad la psicología humana.

violación“Violación, una historia de amor” de Joyce Carol Oates. La editorial Papel de Liar está haciendo una labor excelente publicando estas pequeñas historias góticas y siniestras de la gran escritora norteamericana. La violación en grupo de una madre en presencia de su hija desencadenará una espiral de acontecimientos tanto entre la violada y su familia como entre los violadores y todo el pueblo. Nos brinda con una de esas historias que te dejan sin aliento, que te desbordan y que está escrita con una intensidad y una tensión narrativa sin igual. Qué relato, es imposible no sentirse roto al leerlo, pero qué lectura. Es obligatorio leer a Oates. Una obra para sentir.

“Los amigos de Eddie Coyle” de George V. Higgins. Gracias a Libros del Asteroide gozamos de la recuperación de una de esas novelas en la que se conjugan todas las virtudes que sirvieron para construir la novela Los amigos de Eddie Coylenegra más negra. La trama importa, pero no tanto como todo lo que la rodea. Los hechos se suceden de manera vertiginosa, el hampa, los bajos fondos con su sordidez, quedan perfectamente reflejados con diálogos chispeantes, fluidos, llenos de humor y de drama al mismo tiempo. Una de las más grandes del año. Estamos de enhorabuena.

zorros“Los zorros vienen de noche” de Cees Nooteboom. Como ya comenté en esta reseña, en esta recopilación de relatos cortos que cada historia es una pequeña obra de arte. Tomando como hilo conductor algo relacionado con la fotografía se originan en los personajes reflexiones con respecto a los recuerdos, la nostalgia, la vida y la muerte. Su prosa produce sensaciones indescriptibles, un placer para los sentidos.

“Todo oscuro, sin estrellas” de Stephen King. La última recopilación de cuentos cortos del Sr. King es de las mejores que ha hecho en mucho tiempo. Cuatro historias en las que lo todo-oscuro-sin-estrellas-de-stephen-kingsobrenatural es simplemente anecdótico y lo que importa de verdad es el verdadero terror que puede causar el propio hombre. Como dice en su epílogo el propio escritor “poner a gente ordinaria frente a situaciones extraordinarias”. Son historias de bastante dureza, apelando a los bajos instintos. Stephen King está en plena forma.

“El callejón de las almas perdidas” de William Lindsey Gresham. Sobre una premisa que recuerda a “La parada de los monstruos” de Todd Browning en su comienzo y que luego se decora con elementos del más puro “hardboiled” a lo Jim Thompson, el malogrado escritor  construye una novela que cuenta la historia de un l-callejon-de-las-almas-perdidasaprendiz de mentalista que trabaja en un circo de “freaks” y que intenta prosperar en la vida combinando su capacidad con los timos. Lo onírico se alterna con lo real, los flashbacks con el momento presente, evolucionado los personajes mediante el monólogo interior. Estilísticamente excelsa. Lirismo y crudeza se mezclan a partes iguales.  Muy amarga pero muy recomendable.

“Ventajas de viajar en tren” de Antonio Orejudo. Cierto que este año la novela que se ha publicado del grandísimo escritor español es “Un momento de descanso”, pero nos apetecía recomendar más esta, que, aunque fue publicada en el año 2000, Tusquets la ha recogido en su catálogo en este mismo año. Estamos ante una de esas novelas que es un ejercicio de estilo en sí, lo real se mezcla con lo ficticio. El autor es capaz de cambiar de narrador, de alternar flashbacks con cartas y con historias presentes. Toda la novela es sumamente original y una total virguería. Una buena forma de conocer uno de los mejores narradores actuales.ventajas-de-viajar-en-tren

“El dinero de los demás” de Justin Cartwright. El libro trata sobre la crisis bancaria y los personajes que rodean la caída de un banco británico privado y las consecuencias que traerá, a los periodistas que investigan el posible fraude, pasando por un escritor que recibía financiación del banco y a la propia familia que sustituye en la dirección del banco al patriarca. Relata con mucho humor todos los entresijos de la situación, con las trampas, dinerodemas_bajaengaños, dinero fantasma,… elaborados por los poderes fácticos para seguir manteniendo su estatus a pesar de la catástrofe económica. Está espléndidamente narrado y aprovecha para hacer una sátira sin compasión. Qué libro nos brinda la editorial Ático de los libros, tan necesario como imprescindible.

“El lunes empieza el sábado” de los rusos Boris y Arkadi Strugarski. Es una atípica novela de ciencia ficción mezclada con fantasía. Aunque le cuesta un poco empezar, es simplemente maravillosa, diferente y, sobre todo en su parte final, está lunessábadoestupendamente escrita. Además contiene mensajes de todo tipo de los autores referentes al régimen imperante en la época en que la escribieron pero tratados con humor. Fantasía a raudales. Ciencia ficción de la que nos falta. Qué buena recuperación de Nevsky.

casa-desolada“Casa desolada” de Charles Dickens. Sí, no es de este año, pero si hay que recuperar un clásico este podría ser un buen ejemplo, voluminoso eso sí. En el excelente prólogo de la no menos excelente edición de Valdemar se dicen varias de las virtudes del escritor: “Lo genuinamente dickensiano: su estilo, la densidad de sus motivos, la psicología de sus personajes, en definitiva, el poder inconmensurable de su palabra.” Aquí creó una novela perfecta, en casi todos los aspectos, no hay maniqueísmos, no hay infantilización, lo tenemos en su madurez, con un estilo elegante e inconfundible. Quizá la obra más completa y perfecta del gran autor inglés.

“Fabulosas Narraciones por historias” de Antonio Orejudo

Me encanta reírme. La gente que me conoce sabe que es así. No hay muchos autores que me saquen una carcajada espontánea, ese tipo de risa que, en el caso de que vayas leyendo en transporte público, suele generar miradas de extrañeza y escándalo en la gente que está alrededor y que puede causarte una vergüenza considerable porque no has sido consciente de hacerlo.  Uno de los escritores con el que me ha pasado esta situación es el señor Antonio Orejudo.

Dice el propio Orejudo hablando sobre este libro: “mi primera novela gusta a los que han estudiado o han leído mucho”, curiosa forma de intentar definir el público que ha acabado siendo receptivo a esta novela, que fue publicada en 1996 y que ha sido recientemente reeditada.  Pero es cierto que su intertextualidad ha hecho que sea aún más atractiva para mí, esto unido al humor del que hace gala, y ya tenemos dos de los motivos principales para recomendarla.

La premisa de la novela  es la historia de tres amigos que se conocen en una residencia de estudiantes en Madrid durante los años 20. En plena ebullición de las tertulias culturales y con la Generación literaria del 27 a punto de surgir. Por sus páginas desfilan Juan Ramón Jiménez, José Ortega y Gasset, Ramón Gómez de la Serna, Lorca… y otros  personajes de aquella época.

La narración se mezcla con cartas de 1987 y de otros años, con carteles publicitarios de la época, con textos de los personajes que van saliendo, con cartas que se publican en la revista erótica “La pasión” y las respuestas a esas cartas… completando mezcla de estilos, historias y tiempos que otorgan tal credibilidad, que te da la impresión de estar viviendo en esa coyuntura, aunque sabes que no es así, porque la parodia está presente en todo momento. Una virguería a nivel de estilo y estructura. De esta manera el dinamismo es más que patente, no da tiempo a que se vuelva monótono.

Lo más increíble es que, a pesar de lo anteriormente dicho, el autor no se limita a presentar textos más o menos divertidos, más o menos irreverentes, más o menos creíbles, sino que busca la reflexión continua otorgando a la obra diferentes niveles de lectura y sobre todo compromiso.

Le preocupa la forma y creación de la literatura: “Eso de que el lector es también escritor es una excusa que se buscan los perezosos y los malos escritores”, anticipando a Barthes en este momento y su teoría de la “muerte del autor”.  “Para llegar a lo sublime debemos atravesar las amargas tierras del trabajo; no hay otro camino”, el talento es necesario pero el trabajo más.

También alude en varias ocasiones la dificultad para que la literatura sea apreciada por el público, con perlas como estas:

 “Ya se sabe que a los españoles los escritores y los cerdos sólo nos gustan después de muertos”

“En un país donde la masa es incapaz de humildad, entusiasmo y adoración a lo superior se dan todas las probabilidades para que los únicos escritores influyentes sean  los más vulgares; es decir, los más fácilmente asimilables; es decir, los más rematadamente imbéciles”

Al final, y a pesar de acabar la novela de una manera extraña, absurda, tan diferente al tono anterior, busca precisamente recalcar el mensaje: nos ofrece fabulosas narraciones por la verdadera historia que sucedió, pero en esas narraciones está el reflejo de una época, de una forma de hacer literatura, de un compromiso con lo que haces (“Por eso mis simpatías siempre estarán en aquellas personas que contribuyan a revelar esa gran mentira, ese fiasco sobre el que hemos vivido tanto tiempo y que se llama cultura occidental, es decir, hipocresía de banqueros y nuevos ricos”).

Es una novela genial, diferente, explícita, irregular, comprometida, irreverente… una obra maestra de uno de los mejores escritores españoles en la actualidad.

Valoración del libro: